Pocos músicos en la historia del jazz han tenido una producción tan vigorosa y con tantos recursos como David Murray. En los últimos 44 años, desde que viajó por primera vez a Nueva York como estudiante veinteañero, tocando en 1975 en los típicos loft diáfanos, Murray ha consolidado una carrera brillante y ha grabado más de 150 álbumes a su nombre. Todavía más impresionan los dos logros que este músico ha alcanzado con su constancia: por un lado, como saxofonista tenor, tiene un enfoque hacia la improvisación inmediatamente reconocible, donde sus vuelos free cuentan con el conocimiento profundo de la tradición hacia la que tiene mucho respeto; por otro lado, ha llevado su improvisación hacia un mosaico infinito de desafíos e investigaciones musicales. Murray es señalado como un legítimo sucesor de algunos de los grandes nombres del jazz y, al mismo tiempo, contribuye a poner en valor a jóvenes talentos.
Crecido en una familia baptista, Murray ha descubierto desde muy joven el estilo spiritual negro, en los años en los que Coltrane y Ayler estaban viviendo su mejor época, por lo que no fue ajeno a la lucha política para los derechos de los afroamericanos.
A finales de los ’90, la música de Murray ha sido clasificada como fusión, world music o incluso pan-africana, debido a su interés hacia las culturas caribeñas, surafricanas o senegalesa.
Natural de Oakland y crecido en Berkeley, se muda a Nueva York en 1975 donde encuentra y colabora con muchos músicos de diferentes estilos, entre los cuales cabe destacar Anthony Braxton, Don Cherry, Julius Hemphill Hamiett Bluiett, Lester Bowie, Frank Lowe, Jerry García, Max Roach, Randy Weston y Elvin Jones. En 1976 funda el mítico World Saxophone Quartet con Oliver Lake, Hamiett Bluiett y Julius Hemphill. Desde 1978 ha tenido una época de intensa creatividad y un gran y flexible número de conjuntos, ha compuesto bandas sonoras para películas, colaborado con la compañía de danza Urban Bust Women y con el New York Public Theatre, arreglado las obras de algunos grandes compositores (como Duke Ellington), escrito dos operas y publicado un gran número de álbumes.
En 2006 su grupo Black Saint Quartet renace con la participación de Cassandra Wilson, mientras que más adelante comienza una estrecha colaboración con la
estrella del soul Macy Gray, para quien compone un nuevo repertorio original que se presentará en los mayores festivales (Jazz A La Villette, London Jazz Festival, North Sea Jazz Festival, etc.). En 2013 crea el David Murray Infinity Quartet, que hurga en las tradiciones del jazz, pero acompañado con un selecto número de músicos contemporáneos (Nasheet Waits, Marc Cary y Jaribu Shahid, con la participación de Macy Gray y Gregory Porter) y con este grupo (y nuevos integrantes e invitados, como Jason Moran, Orrin Evans, Geri Allen, Terri Lyne Carrington o Saul Williams, ) ha girado hasta la actualidad.
Book O Sister!
Festival Swing de Sevilla
